Antes que termine el verano
La Costa Michoacana un paraíso poco explorado

Las vacaciones de verano están a punto de concluir, y una opción diferente para disfrutar estos últimos días de asueto se puede vivir en familia, amigos o en pareja, en La Costa Michoacana, la cual es considerada una belleza en su estado más puro. Aquí los turistas podrán disfrutar de playas vírgenes, además de entablar contacto con la naturaleza, conocer la cultura local y, comer delicioso.

Sin embargo, si lo que el visitante busca es mayor comodidad, se recomienda visitar las playas cercanas a Lázaro Cárdenas como Playa Azul, rodeada de palmeras. Por otro lado, si se prefieren la aventura y el ecoturismo, deben visitar Barra de Pichi en donde se pueden tomar excursiones en barca para ver los manglares y buscar cocodrilos.

Otra opción es Caleta de Campos, donde realizan paseos en lancha en Mexcalhuacán y en Pichilinguillo, una pequeña aldea de pescadores, además, los amantes del buceo tienen ahí un buen lugar para inmersiones. La Bahía de Maruata es probablemente uno de los enclaves más bellos de la costa, con formaciones rocosas, palmeras, selva y un estero perfecto para avistar aves marinas.

Siguiendo la costa en dirección a Colima, las arenosas playas de Faro de Bucerías son legendarias y es posible bucear para ver fragmentos de un barco hundido, otras playas son Peñitas, de arena negra, La Manzanillera y La Ticla. San Juan de Alima, es otro centro de playa en un entorno natural exuberante.

La Costa Michoacana también es un destino perfecto para el surf, las mejores playas para practicarlo son: Nexpa, La Ticla, San Juan de Alima y Playa Azul. La gastronomía es un imperdible. Se pueden encontrar deliciosos platillos tradicionales en los en los paradores ecoturísticos indígenas que se encuentran en Maruata, Colola, Faro de Bucerías, La Manzanillera, Palma Sola, La Ticla, Ixtapilla y Tizupán, además, entre Maruata y Coahuayana algunas playas cuentan con cabañas, palapas o paradores ecoturísticos gestionados por comunidades nahuas.