Colaboración especial
¿Logrará el AIFA su objetivo de ser un alterno al AICM?

El aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA) aún continua en una gran controversia, desde antes que empezara su construcción ya estaba en el ojo del huracán, primero porque no era factible su operación en ese lugar y por las dificultades que se tienen como el cerro que obstruye los despegues y aterrizajes y una serie de objetos encontrados en los terrenos cercanos a la construcción. Ni hablar de la distancia y la poca conectividad terrestre y lo difícil que resulta conectar un vuelo internacional llegando al AICM con un vuelo nacional saliendo del AIFA.
 
Sin embargo, se fueron desechando o ignorando todos los inconvenientes y se siguió adelante sin contemplar que es el pasajero quien decide desde que aeropuerto volar. Hay pocos de ellos que han tomado la decisión de utilizar el AIFA en vuelo nacional y se debe principalmente a que viven en zonas cercanas y por las promociones en tarifas que las aerolíneas han tenido que implementar para incentivar el uso de este aeropuerto.
 
Las aerolíneas, ahora más que nunca, revisan con extremo cuidado su rentabilidad y tan es así que Aeroméxico ya tuvo que cancelar dos rutas desde el AIFA, principalmente por ser vuelos que ofrecen a pasajeros de negocio y que resultaron con muy baja ocupación y le van a apostar a otras rutas como Puerto Vallarta y Acapulco, destinos turísticos para ver si logra tener más reservas y salir con más pasajeros a estos destinos que permita lograr al menos un buen punto de equilibrio.
 
Como mayoristas, nos cuesta mucho dar a conocer un destino ya que es apostarle y requiere de buena inversión, así es que puedo imaginar los gastos que tienen las aerolíneas para empujar una nueva ruta y en un nuevo aeropuerto con sus complejidades tal y como resulta ser el AIFA.
 
La idea de tener más aeropuertos funcionando es una buena solución a la saturación actual que sufre el AICM, echar a volar el de Toluca y el de Puebla es acertada también, pero se debe considerar su fácil acceso a los aeropuertos y sobre todo, vías de comunicación seguras para todos los pasajeros. No olvidemos la inversión para las empresas aéreas que resulta muy costosa, ya que tienen que considerar diversos gastos operacionales y los tiempos por los que atravesamos, tanto por la pandemia como por la economía mundial, no son los óptimos para aventurarse en rutas y aeropuertos no rentables.
 
Afortunadamente y dicho por expertos no se va a tener que invertir mucho dinero en la terminal 2 del AICM como se había previsto porque tirarlo y hacer otro nuevo sería una carga muy pesada para el gobierno. Ya lo dijo un Arquitecto de CIMA que todo está bien y que fue edificado con una base muy sólida y que el hundimiento es provocado por la misma afectación en la ciudad.
 

CON MIS SALUDOS DE SIEMPRE